domingo, 11 de mayo de 2008

Encuentro de Familias Lesbianas y Gays en Tarragona

La experiencia de asistir al Encuentro de Familias Lesbianas y Gays de Tarragona, organizado por la FLG, del 1 al 4 de Mayo pasados, ha sido extraordinaria. Nunca nos habíamos reunido en España tantas familias homoparentales con sus hijos.
Ya en el encuentro de Santander, del 19-21 de octubre 2007, organizado por Alega y la FELGTB, nos juntamos alrededor de 80 personas. En esta ocasión hemos sido más de 300.
Ha sido una oportunidad magnífica de compartir las propias vidas, las decisiones para tener y criar hijos, los esfuerzos, los inconvenientes, las tomas de decisión, las expectivas, las ilusiones, los problemas, las relaciones con la familia extensa o los propios hijos...tantas y tantas cosas, que difícilmente podrían recogerse en las conclusiones oficiales que salgan de dicho encuentro.
Las oportunidades de charlar informalmente fueron muchas, o de crear pequeños grupos para comentar experiencias o exponer inquietudes.

Hemos tratado en diferentes mesas redondas, conferencias y talleres temas importantísimos como el bullying homofóbico, las diferentes maneras como formamos nuestras familias: sean por métodos de reproducción asistida, por adopción, coparentalidad, madres solidarias, familias reconstituidas, acogimiento familiar.
Contamos con referentes del movimiento LGTB como Armand de Fluviá o Jordi Petit que nos hablaron de todo lo que se ha avanzado y cambiado desde hace 30 años hasta hoy. Armand nos leyó lo que en el Manifiesto del FAGC se decía sobre la familia, y Jordi hizo hincapié en nuestro estar permanentemente fuera del armario y constituirnos en un "último frente de lucha homosexual", por todo lo que hacemos en nuestra cotidianeidad.
La Dra. Mª de Mar González, de la Universidad de Sevilla, nos habló de los dos estudios realizados hasta el momento por su equipo, sobre nuestras familias y sobre hijos adultos, criados en ellas. Confirmando la ausencia de grandes diferencias de nuestras familias, comparadas con la población general. Que formamos contextos de desarrollo sano para los niños. Y que de nosotros se puede aprender bastante: educamos en la tolerancia, en una manera de vivir la sexualidad libremente, reflexionamos y maduramos mucho nuestra decisión de tener hijos, y que en nuestras familias se realiza un aprendizaje de roles de género más igualitario.

Quedan muchas cosas por conseguir: aspectos legales, como el del registro en común de los hijos, o la lucha contra el rechazo del entorno. O que los niños se consideren excepcionales debido al desconocimiento de otros como ellos. De ahí la importancia de estos encuentros o de la creación de grupos locales de adolescentes en estas circunstancias.
Hay una necesidad de formar a profesionales, favoreciendo la eliminacion de sus prejuicios, y para que tomen conciencia de la diversidad familiar existente. Que la escuela sea una ventana para que otros niños conozcan nuestras realidades.

Pudimos asistir a la proyección de un interesante documental realizado por Ana Boluda, Queer Spawn. Rodado en EEUU, varios chicos y sus familias comentan como es su vida. Y se muestran escenas del encuentro anual de familias en Provincetown, Massachussets. Durante el encuentro Ana estuvo grabando un futuro documental sobre la realidad española.

Y por lo demás los niños participaron en grupos de juegos, marionetas, música, talleres de adolescentes. Hubo sesión de magia, baile. Pudimos pasar un día en Port Aventura, e incluso visitar la Tarragona romana, o pasar horas en la playa.

En general unas Jornadas productivas y gozosas, para todos. Algo que hay que agradecer a los organizadores, la FLG, cuyo esfuerzo ha sido ímprobo.

Se habló de las formas de los grupos y asociaciones existentes en España, (todavía limitados fundamentalmente a FLG en Barcelona, GALEHI en Madrid, y algún pequeño grupo en otras regiones) y su coordinación futura. Quedando la propuesta de que el próximo encuentro lo organice GALEHI.

Creo que con este encuentro hemos conseguido muchos objetivos, tanto personales, como de visibilidad de las familias y de impulso a un movimiento, que como decía en el primer post de este blog, es imparable.

sábado, 10 de mayo de 2008

Familias homoparentales

Las familias homoparentales son cada vez más visibles, aunque siempre hayan existido. Muchos gays y lesbianas han tenido hijos o los adoptaron, y los criaron solos o en pareja. Cuando no había las condiciones legales apropiadas. Hoy día, con las leyes del matrimonio de personas del mismo sexo, de adopción y de reproducción asistida, la realidad homoparental ha mejorado mucho, y muchos son los que están realizando su maternidad y paternidad.

Tendría que ser algo que todos nos lo planteáramos, aunque pudiera ser para descartarlo tras cierta reflexión. Pero no negarnos el derecho a pensarlo en serio.

No somos personas de segunda, y tenemos el derecho a crear una familia con hijos propios o adoptados. Pero la homofobia internalizada nos inclina a no considerarnos aptos para ser madres y padres. Sobre todo los hombres. Nos vemos más lejos de ser padres, al tener muy metido en nuestra cabeza el mito de que un niño necesita una madre, o que son las mujeres las únicas capacitadas para criar.

El amor y la capacidad de criar hijos no están en los genes femeninos; sobre todo es algo que se aprende socialmente. En la educación de los varones, no se nos inculca la idea de criar a los hijos, como sí se hace con las niñas, aunque cada vez tenemos más ejemplos de varones que crían a sus hijos. Y es cuestión de aprender.

Muchos jóvenes, lesbianas y gays, se están planteando, cada vez más, como algo natural que tendrán hijos en un futuro, y que eso forma parte de su desarrollo como personas. Pero hasta época reciente muchos gays ni pensaban que la pareja estable fuera posible; menos aún pensaban en poder ser padres. Su vida era como una eterna adolescencia, sin tener que madurar en sus relaciones.

Mientras que las lesbianas tienen la posibilidad de tener hijos biológicos, los varones tenemos que adoptar, o criar hijos de una relación heterosexual anterior. Algunos están llegando a acuerdos con amigas para tener un hijo compartido, aunque cada uno tenga su pareja. Se crea una especie de familia reconstituida en la que los padres se hubieran separado y volvieron a unirse a otras personas.

Con el aumento de la visibilidad de las muchas familias que ya hay, y las que se vayan creando, habrá más modelos y se conocerá mejor socialmente, lo que disminuirá el rechazo social y el auto-rechazo a nuestras familias. Las que predominan son familias homomaternales (80%) frente a las homopaternales (20%) (Cifras aproximadas)

Los encuentros de familias homoparentales con sus hijos son importantísimos como forma de encontrar apoyo, modelos, visibilidad en un espacio seguro y para que la sociedad nos vaya teniendo más en cuenta.

Hay todavía mucho por hacer, aunque se ha avanzado bastante. Lamentablemente la Iglesia y las fuerzas reaccionarias lo han tomado con el tema de la adopción por gays y lesbianas y se escuchan voces terribles en contra de nuestra maternidad-paternidad, como si fuéramos auténticos monstruos, pervertidos y destructores de la familia; que le robamos a nuestros hijos su “derecho a una familia normal”, como si una familia homoparental no fuera sana, y como si hubiera un derecho natural a tener dos padres de distinto sexo, cuando cada vez se cumple menos. Nadie se escandaliza de que una viuda críe a sus hijos, de las familias reconstituidas o de hijos criados por abuelos.

No se tiene en cuenta lo importante: la capacidad de dar amor, protección, seguridad, cuidados, educación…que en general tenemos en la misma proporción o más que cualquiera, no son cualidades ligadas a la orientación sexual. Y quizás, por tener que ir contracorriente y pensarlo más, en general nuestras familias pueden ser hasta mejores, más deseadas, más cuidadas, y ser espacios seguros para esos niños, en el caso de que fueran gays o lesbianas. Algo que no han sido para nosotros nuestras familias heterosexuales.

Tener hijos lleva a tener que salir del armario ante ellos, ante la sociedad que nos rodea, ante el colegio, y curiosamente las familias homoparentales acaban convirtiéndose sin pretenderlo en verdaderos activistas de la causa LGTB y punta de lanza de transformación social. El tener que defender a nuestros niños del posible rechazo social por estar criados en nuestras familias, implica intervenir en diferentes instancias: la familia extensa, el colegio, clubes... Implica luchar para conseguir que tengan los mismos derechos que los demás niños, en una sociedad homófoba. Y este es nuestro reto: conseguir una sociedad más diversa y mejor.

Direcciones útiles

www.familieslg.org Associació de famílies lesbianes i gais. Grupo catalán que defiende los derechos de las familias homoparentales y organiza reuniones para difundir la igualdad y la diversidad y aportar ayuda y encuentros a las madres y padres que quieran. Es importante encontrarse con otras familias, lo que permite a niños y niñas y sus madres y padres, socializarse en un ambiente seguro, con otros pares que tienen las mismas circunstancias. Hay muchos enlaces y bibliografía, (que aunque en catalán, puede existir en castellano).

www.felgt.org La FELGBT, Federación estatal de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales, tiene un área, dedicada a nuestras familias, y se pueden encontrar en su web materiales muy interesabtes. También puede permitir contactar con ellos y localizar asociaciones cercanas que lleven el tema de familia.

noviembre 2007
Artículo mío publicado en Zero 103.

martes, 6 de mayo de 2008

Charla en Sevilla, sobre Familias Homoparentales

El próximo viernes 9 a las 20'00 horas en el C.C. Las Sirenas, Sevilla, daré una charla sobre Familias Homoparentales . Los contenidos de la charla serán:

Situación actual de las familias homoparentales en España.
Posibilidades de crear una familia: tanto las biológicas, como las adoptivas.
Familias homoparentales reconstituidas.
Homofobia y familias LGTB
Salida del armario con los hijos/as.
Salida del armario de los hijos/as.
Peculiaridades de los hijos/as de familias LGTB.
La familia extensa. La escuela.
Importancia de encontrarse con otras familias similares